Jardín en Sant Cugat del Vallés

Este jardín rodea una casa de los 90, inundada de ladrillo y teja de barro. Una construcción de calidad y de espacios en diferentes ambientes y niveles. El diseño de los exteriores, quisieron homenajear estos materiales y estructura, mediante la modulación de ladrillo y “toba”. Con ellos se crean muros de contención, pavimentos, un estanque y un banco volado. Líneas rectas para crear diferentes espacios (el cliente ha llegado a contar 10 espacios distintos) donde reposar la vista y el espiritu. Los clientes, con gusto díria ecléctico, dicidieron asentarse de nuevo en Valldoreix (Sant Cugaut del Vallés), después de años viviendo en Bélgica. El jardín fué moldeándose de manera que distribuciones más clásicas como la alineación de cipreses, esculturas o árboles en espaldera, fueron integrándose en un diseño de líneas simples desdibujadas por la vegetación. Plantaciones mediterráneas y de bajo consumo hídrico, muestran sus atributos durante todo el año. Devolviendo este jardín a la vida.

Fotografía @ Laura Bargunyó